Con un frío de por debajo de los 0º, no me quedó otra que comprarme unos guantes y buscar por todo Nanjing Road (que ya es decir poco...) una bufanda-capucha, qué diréis, que horterada! pero a mí me flipa desde que se la ví a un negro en Starbucks... la bufanda. Por cierto el negro cenaba una ensalada de Starbucks a las 1 de la madrugada, sólo, y ni siquiera miró el móvil. Sí miraba de reojo, y con cara de pavor, las chispas que saltaban de mi nueva cerilla-mechero de 2000 usos:
El instrumento en cuestión cada vez que quieres encender un cigarro, suelta un número de chispas acercado al de cualquier cremá Valenciana y finalmente una llama que sirve de antorcha para buscar el tesoro perdido de Indiana Jones. Aún así, es el típico objeto souvenir con fotos de Shanghai que me flipa comprar por un eurín. También compré dos regalos, uno pa La Paez y otro para Jota, que son dos frikadas sólo aptas para fans como ellos. Sorpresa!
Una vez corroborado que mi bigote, cejas y pestañas están a salvo, os dejo que es Sábado por la mañana y tengo por delante un showroom que visitar y muchas más tiendas en las que gastar. Tengo que hacer compras navideñas, un regalo para un cumpleaños y muchas cosas para mí, que ya toca!
Paga extra navideña en parrilla de salida.
Besos consumistas.