Nuestra compañera Natalia hoy nos ha repartido éstos caramelos procedentes de Extremadura.
Lo único bueno de la vuelta de vacaciones es que siempre hay alguien que trae cositas de su tierra, y los caramelos el Triunfo os digo yo que son maravillosos. Aquí os los dejo, pero tendréis que ir a Badajoz a por ellos.
El Triunfo nos ha alegrado una mañana horrible de vuelta la oficina y vuelta a la vida 'chunga'.
Me he levantado 40 minutos más tarde que la hora que había programado, me he metido en la ducha y he llorado lágrimas de dolor postfestivo y postjolgórico. Hoy todo son adjetivos.
Ayer quería quedarme en el sofá con Alex por la eternidad, así en pijama, con varias botellas al alcance de la mano y con flyers preparados para ir after hours a darlo todo por Madrid, por donde sea. Quiero ser rico, no trabajar y no meterme en la ducha un 3 de enero y llorar amargamente porque llegue el taytantos de Abril; que si, que pa colmo este año semana santa es más tarde que nunca. Tendría que pensar en pedirle perdón al papa por mi sátiro blog de hace un tiempo y plantarme en mitad de San Pedro a rogar porque adelanten la Pascua y yo vuelva a tener unos días de nadismo.
El fin de semana nunca es suficiente. Y ahora hay que añadir un riesgo más al Lunes por la mañana, y es que a los de Apple les ha dado por desprogramar la alarma de sus dispositivos y que cada uno se levante cuando quiera. Anarquía celular total se llama eso. Y como le explicas a tu jefe que llegas tarde porque tu iPhone no funciona, pero tampoco el de tu amiga, ni el del vecino. Me imagino como un inmenso show de Truman en el que un señor con bigote y zorrita de rodillas bajo su inmensa mesa de roble...le da a un botón por error, o por excitación...y a ninguno nos despierta nuestro querido móvil. Pues eso ya ha ocurrido, preparémonos para el apocalípsis vía Appstore.
Mientras llega, creo que iré a endulzar mi lengua a Badajoz, que igual en Almendradejos me sale un granjero de esos de Cuatro, que está rico (de dinero) pa jartarse y me mantiene a cambio de ordeñar cada mañana a 4 inmensas vacas. Si lo miráis bien...quizás sería lo más cercano a un bukake que viviera en éste 2011, 4 vacas lecheras, yo y un pajar....muy Bel Ami me está quedando no?
Me despido pues.
Besos
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